¡Madre mía!
No encuentro otro modo de expresar lo buenas que están. Y es que, estas galletas son un postre muy especial. De aquellos que te permiten comer sin parar.
No encuentro otro modo de expresar lo buenas que están. Y es que, estas galletas son un postre muy especial. De aquellos que te permiten comer sin parar.
Perfectas para sorprender a nuestros invitados, pero debemos tener tiempo, ya que si queremos que sean caseras 100%, necesitamos toda una mañana. No obstante, si queremos podemos comprar productos ya hechos o de rápida elaboración.
Se tratan de una sencillas galletas de mantequilla muy doradas, con un relleno de crema catalana casera.
Pero tiene un pequeño secreto, este, es el almíbar.
En primer lugar, haremos un almíbar con los frutos que más nos apetezcan. En este caso, yo he elegido uno de melocotones y plátano. (Podemos comprar el almíbar ya hecho, pero no tiene nada que ver.)
A continuación elaboraremos la crema catalana, (al igual que el almíbar, lo podemos comprar, pero hacerlo en casa es cuestión de paciencia y se nota en el resultado final.)
Por último, elaboramos las galletas de mantequilla y dejamos que se doren más de la cuenta, así quedarán más crujientes.
Mi secreto es añadir almíbar en la crema y en la masa de las galletas, hace que nos ligue todo a la perfección.
Si queréis, podéis acompañar las galletas con un poquito más de crema catalana, servida en una taza. Así se pueden ir untando.
Recomiendo que las preparéis poco antes de servir, ya que sino, pueden quedar un poco blandas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario